Durante el año 2010, la economía española ha seguido sufriendo los efectos de la crisis económica y financiera que ha sacudido a la mayor parte de los países desarrollados.
A pesar de todo el sector turístico mantiene su posición según los informes desprendidos, ya que los números y porcentajes han sido similares a los registrados el año anterior y, en general, han variado poco a lo largo de los años. Lo cual denota que el ocio y el descanso, a pesar de la crisis sigue siendo una prioridad para los españoles.
Fue este el que volvió a destacar como principal motivo de los viajes de los residentes en España. Le siguieron en importancia los viajes realizados para visitar a familiares o amigos en el trabajo.
Dentro de los viajes de ocio, la gran mayoría se decanta por el campo y la playa. Le siguieron en importancia los viajes clasificados como otro tipo de ocio y, a una distancia, los viajes de turismo cultural.
Durante el año 2010 el 53,9% de los residentes en España efectuó al menos un viaje fuera de su residencia habitual.
El análisis de la población viajera en función del destino revela que fue mucho mayor la proporción de viajeros dentro del territorio nacional que los que acudieron al extranjero.
Los residentes de las comunidades autónomas de Madrid, Cataluña, Andalucía, y la Comunidad Valenciana resultaron los que más viajes internos realizaron dentro de España.
Algunas de estas comunidades han sido mercados emisores y receptores de viajeros y visitantes.
Madrid, por ejemplo, concentra el mayor número de visitas por trabajo y turismo cultural.
El litoral sigue siendo el más demandado en cuanto a turismo de sol y playa, aunque acusa mucho la estacionalidad, siendo los meses de verano, concretamente julio y agosto, los que más movimientos registran.
El perfil socio-demográfico del turista es el de una persona con nivel de estudios, cuya situación laboral es estable.
En relación con la composición del hogar, las familias más viajeras fueron las parejas sin hijos y cuyo cabeza de familia es menor de 51 años.
Una de las características intrínsecas de los desplazamientos internos de los residentes en España es el elevado porcentaje de viajes que se realizan dentro de la propia comunidad.
Canarias y Andalucía fueron las comunidades donde se realizaron más viajes dentro de la propia comunidad. A más distancia se situó Cataluña.
Es destacable que debido al descenso de los viajes de fin de semana, que son los que se realizan en mayor medida dentro de la misma comunidad, el porcentaje de viajes interregionales ha descendido en practicamente todos las comunidades de origen, incrementándose el peso de los viajes a otras comunidades.
Las comunidades que atrajeron más cantidad de visitantes internos fueron Andalucía, Cataluña, Castilla y León y la Comunidad Valenciana.